Hola de nuevo! Reciclar muebles viejos o rotos puede ser muy útil y divertido. Hoy vamos a reciclar una balda de estante para convertirlo en un reposapiés. No os vais a creer lo fácil que es y lo bien que va a quedar. Usaremos la base de un estante para la base del reposapiés.
Pintura
Pintamos las patas del estante con un pincel con pintura chalk paint de color verde menta de la marca Americana decor.
Tapizado
Para el tapizado necesitaremos una pieza de espuma cortada a medida como relleno para el tapizado. En vez
de cortar los bordes rectos, es recomendable redondear el borde superior para que el tapizado quede ligeramente redondeado. Debajo de la pieza rectangular colocamos unas piezas más finas si queremos aumentar el espesor en la parte central y así intensificar el efecto abombado. Fijamos la espuma con pegamento en spray para una mejor fijación.
Para tapizar he comprado una tela de lino estampado que da un aspecto rústico chic al reposapiés. Para fijarla utilizaremos una grapadora de tapizar. Colocamos una grapa en la parte central de cada lado en la parte inferior de la balda para fijar la tela. A partir de ahí vamos colocando grapas mientras tensamos la tela para que no queden arrugas y la forma sea la adecuada. En la zona de las patas tenemos que fijar las grapas en el lateral de la balda y no en la parte inferior por lo que quedarán a la vista. Para cubrir las grapas del lateral utilizaremos una cinta de rematar de uso en tapicería. Yo he utilizado un cordel de color verde que combina con el estampado porque me parece que le da un aspecto más natural.
Pues ya está! Que os ha parecido? Seguro que no os lo imaginabais…
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